Tiempo hace que no me veía obligado a bajar de la Torre Oscura para aplastar con mi maza lo que mis legiones son aparentemente incapaces de aplacar; un nuevo gusano que se revela contra las leyes dictadas en mi propia tierra y cuales espero que nadie infrinja bajo el riesgo que ello conlleva y todos conoceis. Mi poder es implacable y quien no se someta a mi palabra podrá comprobarlo tarde o temprano.
En esta ocasión, mi sentencia marcará el destino del usuario Rick, el cual, habiéndole mis Nazguls advertido ya antaño y teniéndo que presenciar reiteración en sus faltas, será confinado en los calabozos de Mordor, donde el tiempo pasará hasta que su recuerdo no sea más que una efímera e insignificante bruma. El motivo; obviar completamente la primera y más importante de las normas :
1.- Respeta al resto de usuarios, manten una línea de discusión tranquila y amable. No se permiten insultos ni descalificaciones.
Una escoria más que mostrando prepotencia y constante falta de respeto a otros usuarios del foro, tanto con sus patéticas insinuaciones como con arremetidas directas, no tendrá diferente final al de tantos otros insectos que no terminarán de entender que en mis dominios jamás podrán escapar a mi juicio y que nunca permitiré tales insolencias. Así pues, tome efecto en este preciso instante tu destino, Rick... y recordadlo siempre... yo lo veo... TODO.
Aunque corras, aunque te escondas no tienes escapatoria. Soy el Señor de la Tierra Media. Soy tú Señor. Hagas lo que hagas lo sabré. Los ojos de mis siervos son mis ojos. Te estaré vigilando...
Rick
