Amon BaradEn este artículo de Cruello DVille encontrarás la segunda parte de la construcción del bastión gondoriano de Amon Barad.

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MATERIALES Y HERRAMIENTAS Nivel de dificultad

  • Madera DM (para la base)
  • Cartón pluma
  • Madera de balsa y/o madera de marquetería
  • hilo cola de ratón
  • Varillas de madera
  • Poliestireno
  • Ramas naturales
  • Palos de barbacoa/pinchitos
  • Imanes
  • Cola blanca y/o silicona
  • Regla
  • Cutter
  • Pequeña sierra/segueta
  • Lápiz
  • Tijeras
  • Se puede usar también una sierra específica para poliestireno.


PINTURAS

  • Acrylic Studio de Vallejo (AS): Negro Óxido de Hierro Nº 12, Gris Medio Nº 62, Sombra Tostada Nº 18, Amarillo Óxido de Hierro Nº 8, Titanio Crudo Nº 42 y Blanco Titanio Rutilo Nº 11.
  • Citadel (C): Devland Mud.

INTRODUCCIÓN

Retomamos la guía paso a paso de Amon Barad, para hablar de la almenara en sí.
Realmente, podríamos decir que se trata del elemento central del lugar, pues según se explica en el suplemento La Sombra en el Este, el emplazamiento conocido como Amon Barad era una de esas almenaras que existían por el reino de Gondor y que servían para alertar de la presencia de posibles invasores. Así que, aunque mi proyecto haya modificado la estructura en sí del elemento propuesto en el libro, mantener controlada y activa la almenara debería seguir constituyendo el motor principal de los escenarios en torno a esta construcción.

Tal y como presenté en el boceto de la primera parte, mi idea era representar una formación rocosa, que sería la más alta de la zona, por lo que habría sido elegida para situar sobre ella la almenara en cuestión. Sin embargo, a esa primitiva almenara, se le habría añadido a escasos metros la torre que ya presenté en la anterior entrada, como una hermana vigilante. Debido, muy probablemente, a la necesidad de subsanar los problemas defensivos que representaba la idea original y su deterioro. De esta forma, la almenara seguiría estando en la formación rocosa, sí, pero se accedería desde la torre, pudiendo limitarse el acceso si fuera necesario.

PASO A PASO

PASO 1: LA PLATAFORMA DE LA ALMENARA

Aunque suele recomendarse no empezar la casa por el tejado, en este caso comencé por aquello que coronaría la formación rocosa inaccesible (o casi inaccesible). El fuego se situaría en lo alto de ésta, pero la leña que lo alimentara debería colocarse sobre algún lugar más apropiado que el simple suelo de roca, así que lo primero que realicé fue una base con poliestireno, que representaría una plataforma de piedras sobre la que se situaría la madera. A la plataforma le hice cortes para simular las piedras que la formarían y después le apliqué una capa de Alkyl, el mismo sellador que había usado para la base de la torre.

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No conservo fotos de los pasos de la pintura, pero son tan básicos como dar una capa base de Negro Óxido de Hierro Nº 12 (AS) y aplicar después dos pinceles secos: Gris Medio Nº 62 y Blanco Titanio Rutilo Nº 11 (ambos también de AS).

PASO 2: LA FORMACIÓN ROCOSA

Con la plataforma hecha, y escalada con las miniaturas, fue mucho más fácil tener una idea de las proporciones que debería tener la formación rocosa. Así que, con ello presente, recorté diferentes cuadrados de poliestireno que fui superponiendo y pegando con cola blanca hasta alcanzar la altura correcta. Y con todos los bloques superpuestos, fue también mucho más fácil recortar la futura base en DM y biselarla.

Tuve al lado la torre y usé un resto alargado de DM para comprobar que ambos elementos podrían unirse después. Igualmente, comprobé que la plataforma cabía sin problemas sobre la última de las piezas, teniendo margen para que la futura unión entre torre y formación rocosa pudiera descansar.

Para que los trozos de poliestireno tuvieran una consistencia más firme y no se desplazaran por la propia cola descuadrándolo todo, atravesé algunos palos de pinchitos/barbacoa desde arriba y hasta abajo.

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Cuando la pila de poliestireno se secó comencé a darle una forma más acorde con la sierra de poliestireno. Es una forma rápida de realizar los primero cortes, pero el acabado que proporciona no es el más idóneo para representar rocas, así que después merece la pena dedicar algo de tiempo ca realizar cortes más propicios con el cutter.

Podemos aprovechar también para incluir alguna grieta e ir tratando de disimular las líneas horizontales que dejan las uniones entre los bloques de poliestireno.

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De todas formas, las uniones las terminé de disimular con la misma pasta de modelar que usé para los contrafuertes de la torre, aunque en esta ocasión no la diluí y las usé más como una plastilina que como un yeso.

Antes de se se secara, recurrí una vez más al truco de la pelota de papel de aluminio para darle a toda la formación ese aspecto rugoso de la roca. En este paso también se pueden disimular muchas de las uniones o imperfecciones de los bloques de poliestireno, mucho más teniendo en cuenta que volví a usar para todo el poliestireno de baja densidad que aún tengo.

Como se puede a continuación, aún no había pegado la formación a su base, ya que de esa forma pude trabajar mucho más cómodamente en su aspecto final.

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Fue justo al finalizar esta parte del proceso cuando pegué la formación a su base.

PASO 3: LAS ESCALINATAS Y TEXTURIZAR LA BASE

Quería que la formación rocosa pudiera interpretarse como la almenara original de tiempos remotos. Así que añadí una serie de escalones para representar una antigua escalinata, hoy destruida. Son pedazos cuadrados de poliestireno, de diferentes tamaños y sin pretender que fueran muy uniformes y rectilíneos, ya que iban a representar algo ruinoso. Para que se fijaran mejor a la formación rocosa, recurrí de nuevo a los palos de pinchitos/barbacoa. Cogí pequeños trozos de estos y los clavé en la pared por uno de sus extremos y fui insertando los bloques/escalones en el extremo que sobresalía.

Para que todo encajase mejor, volví a usar la pasta de modelar para que los escalones quedaran mejor integrados en la pared de roca. Por último, apliqué a diferentes zonas de la estructura una pasta selladora, de la que suele usarse para tapar agujeros y una capa del sellador ya comentado anteriormente en la plataforma.

Mientras se secaba todo lo anterior, cubrí la base con cola blanca y esparcí la nueva arena adquirida en TEDi que comenté en la primera parte del proyecto, y que cada vez me gusta más.

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PASO 4: LA PINTURA DE LA FORMACIÓN ROCOSA

Pintarlo todo fue también bastante sencillo y usé los mismos que en la elevación de terreno de la torre, en la primera parte del proyecto.

Todo, excepto las escalinatas, lleva una primera capa de Sombra Tostada Nº18 (AS). A la parte de roca vista, le apliqué un pincel seco de Gris Medio Nº62 (AS), seguido de otro de Blanco Titanio Rutilo Nº11 (AS). Y a la parte de arena/tierra sólo un pincel seco de Titanio Crudo Nº42 (AS). Las escalinatas siguen el mismo patrón de la plataforma: capa base de Negro Óxido de Hierro Nº 12 (AS) y los dos pinceles secos de Gris Medio Nº 62 (AS) y Blanco Titanio Rutilo Nº 11 (AS).

Para dar por concluida esta parte, añadí algo de césped electroestático aquí y allá como en otras ocasiones, y pegué la plataforma en lo alto. Con todo finalizado volví a comprobar que las medidas eran las oportunas, y empecé a hacerme una idea de cómo se vería el resultado final.

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PASO 5: LA PIRA DE LEÑA DE LA ALMENARA

Lo primero que hice fue cortar un trocito de DM sobrante con la misma medida que la plataforma para crear una base. En ese momento pensé que no sería mala idea tener la posibilidad de quitar o poner la pira de leña según el escenario o el desarrollo de éste. Así que me hice con un rollo de imán adhesivo en un bazar. Elegí este formato porque puede cortarse fácilmente a la medida que deseemos. No necesitaba que fuera adhesivo, pero no encontré otro similar sin esta característica. Hice cortes en la plataforma de poliestireno y el trocito de DM para insertar un pedazo de imán y ¡listo!

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En una de nuestras salidas al parque, encargué a mis hijos que recogieran ramitas finas y tener así un pequeño almacén para futuros usos. Por ejemplo, para una almenara. Las fui cortado a la medida de la plataforma, formando varios pisos pero pegando cada uno en una dirección diferente. El último es un poco más caótico, para que no pareciese algo perfectamente medido.

A la base de DM le apliqué los mismos colores que la plataforma de poliestireno. Y al conjunto de ramas les apliqué un lavado con Devland Mud (C).

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PASO 6: LAS PASARELAS

Es el paso más difícil de explicar, pues aunque contaba con una idea en la cabeza, fue más pura improvisación con cada nuevo pedacito de madera que coloqué tratando de crear unas estructuras que aguantaran... y no lo conseguí totalmente.

Pensé al final en crear dos pasarelas surgiendo de cada "torre" por pura lógica estratégica. Porque creí que sería algo nefasto para los defensores dejar paso libre a posibles invasores mediante una única pasarela fija. Por eso me decidí a construir una pasarela fija que surgiría desde la formación rocosa, y otra, "móvil", que podría quitarse o ponerse según conviniese, y a la que podrían cortarse las cuerdas dejando caer la plataforma en sí e incomunicada la almenara de la formación rocosa.
Indudablemente, decidir algo así casi al final del proyecto acarreó dificultades imprevistas.

La pasarela que se situaría en la formación rocosa partió de una estructura o esqueleto de varillas cuadradas de madera, adquiridas en un bazar a un precio ridículo.

Sobre ella situé un pedazo de madera a modo de plataforma/pasarela. Y con esa idea básica ejecutada, sumé algunas varillas más para que sustentarán mejor todo en la pared de la formación rocosa y le dieran algo más de cuerpo al conjunto.

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En cuanto a la otra, la que iba a poder moverse, también empecé por una estructura básica de varillas que me permitiera colocarla sobre el murete de la terraza de la torre.
Tras eso, levanté una estructura que me permitiera tender las cuerdas desde la plataforma hacia el supuesto mecanismo de bajada/subida. Tengo pocas imágenes de este proceso porque fue la parte más improvisada de todas, y con cada paso iba comprobando si funcionaba o no.

El mecanismo en sí consiste en un pedazo de pajita de papel adosado a la parte trasera e inferior de la estructura. En su interior introduje una varilla de menor diámetro, de manera que me permitiera girarla. Para que la varilla no se saliera de la pajita, coloqué dos círculos de cartón a modo de tope, que también harían suponer algún tipo de rueda para hacer girar el mecanismo.

La cuerda es Hilo cola de ratón (un hilo cubierto de cera, muy útil para representar algo así), adquirido también en un bazar. Lo fijé con una vuelta a la varilla que permitiría enrollarlo e hice dos orificios en la plataforma, para fijarlo también a ella.

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Aunque suelo trabajar mejor con cola blanca que con silicona o pegamento caliente, en el caso de ambas plataformas me decanté por estos últimos, ya que necesitaba una rápida adherencia.

El resultado fue visualmente muy bueno, y las imágenes creo que lo muestran así. Sin embargo tienen truco. Sabía que las estructuras no iban a ser capaces de soportar el peso de las plataformas y mucho menos de una miniatura sobre ellas. Traté de compensar eso añadiendo en la parte inferior restos de antiguas peanas metálicas de caballería de la marca Gamezone, pero no ha sido suficiente. Así que ando tras unas plomadas, estilo a las que se suelen usar en pesca, para hacer un contrapeso efectivo que pueda disimular con algún elemento decorativo. De ahí la colocación tan precisa de las miniaturas en puntos claves a la hora de tomar las fotos. Como se ve en las imágenes, el mecanismo funciona, y para ser mi primer intento con algo así, no estoy del todo disgustado.

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La pintura de ambas pasarelas comenzó con una capa base de Sombra Tostada Nº 18 (AS) y dos pinceles secos: Amarillo Óxido de Hierro Nº8 (AS) y Titanio Crudo Nº42 (AS).
Y así culmina un proyecto largamente pospuesto. Ha sido realmente satisfactorio ejecutarlo tras aquel primer boceto que planteaba las líneas generales. Y hay que estar también muy satisfecho con el resultado, porque tenemos un elemento muy dúctil, que realmente son dos, y que puede funcionar en muchos escenarios y ambientaciones diferentes.

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El hecho de que torre y almenara sean independientes ofrece muchísimo juego. Y el toque final de hacer que la pasarela que puede unirlos y la pira de leña de la plataforma sean de quita y pon, ofrece recursos adicionales a cualquier escenario. Igualmente que la plataforma no sea única y que una de las parte pueda levantarse/bajarse.

El suplemento La Sombra en el Este presentaba también algunas rocas aquí y allá, así como secciones boscosas, para configurar el terreno del escenario principal situado en Amon Barad. He conservado algunos recortes de poliestireno de los bloques originales de la formación rocosa, así que he pensado en crear un conjunto de diferentes elementos que acompañen a la torre y la almenara, y que puedan conformar esa mesa de juego: ruinas y formaciones rocosas del mismo estilo pero menor altura. ¿Un nuevo desafío de escenografía?

 

Amon BaradSi quieres leer la primera parte de la construcción de esta fortaleza de Amon Barad sigue este enlace para llegar al artículode Cruello DVille.

 

 

 

 


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