En este artículo, BOEL enumera una serie de consejos básicos a tener en cuenta a la hora de construir elementos de escenografía para juegos de miniaturas en general y la Tierra Media en particular.
Para ver el artículo pulsa en Leer Más.
INTRODUCCIÓN
En todos los años que llevo construyendo escenografía he ido aprendiendo a base de leer infinidad de artículos, foros, libros, revistas y tutoriales. Aun así, mi principal fuente de aprendizaje han mis propios errores.
Recuerdo bien la primera vez que se me ocurrió darle una capa de imprimación con spray a unas ruinas que había construido con poliestireno y ver como aquello se derretía ante mis ojos sin entender qué estaba pasando. O cuando tuve que cortar una parte de mi primera maqueta del Abismo de Helm porque al intentar sacarla de la habitación donde la había construido no me cabía por la puerta. Algunos fueron errores típicos de novato, pero otros podía haberlos evitado parándome a pensar un poco antes de ponerme a construir.
En este artículo he tratado de plasmar esas experiencias enumerando 10 conceptos o ideas que considero importantes a la hora de construir escenografía para juegos de miniaturas. Son los siguientes:
1. TEN PRESENTE EL ESPACIO DISPONIBLE EN CASA
La primera pregunta que nos debemos hacer antes de ponernos a construir es ¿voy a tener sitio para guardar lo que quiero hacer? Si piensas construir un elemento de escenografía pequeño o lo vas a dejar luego en el local de un club o una asociación probablemente no vayas a tener demasiados problemas. Pero si lo vas a guardar en tu casa debes tener en cuenta lo que va a ocupar y dónde lo vas a guardar, ya que la escenografía ocupa generalmente bastante espacio y no es fácil de almacenar. Puede ser muy desagradable ver como ese flamante palacio de Meduseld, al que tantas horas y esfuerzo has dedicado, termina dando vueltas por tu casa hasta que acaba rompiéndose por no tener un sitio fijo donde dejarlo.
Lo ideal es poder guardar lo que construyas en un espacio cerrado como un armario, vitrina o simplemente una caja para evitar que se ensucie. Por muy limpia que tengas la casa si lo dejas sobre una estantería se acabará llenando de polvo irremediablemente. Y no es fácil limpiar el polvo en un elemento de escenografía.
Este pequeño bosque puede quedar muy bonito en la estantería de tu dormitorio pero no vas a poder evitar que acabe lleno de polvo.
Si quieres ir un paso más allá y construir un tablero completo personalizado debes tener también en cuenta el tamaño de las puertas y los pasillos de tu casa, el del ascensor e incluso el de tu vehículo.
Es posible que en algún momento quieras sacar esa maqueta de la habitación en la que la has construido, bien porque la quieres llevar a algún local, a la casa de un amigo o porque te mudas de casa. Si la mesa es tan grande que no puede girar por las esquinas o no pasa por las puertas la vas a tener que romper para sacarla y eso, después de haberle dedicado tanto tiempo y esfuerzo a su construcción, puede ser una tragedia.
Una solución a este problema con las mesas grandes es el despiece, es decir hacer ciertas partes de la escenografía de "quita y pon" para poder almacenarla y transportarla mejor.
Tengo la suerte de tener bastante sitio disponible en el sótano de casa pero no siempre ha sido así y desde luego tampoco tengo tanto sitio como para almacenar todas las maquetas montadas (ya me gustaría). Cirith Ungol se construyó como mesa para el Games Day de Barcelona 2008 y eso suponía un largo transporte en carretera en una furgoneta, así que para evitar todos estos problemas de espacio diseñé un despiece teniendo en cuenta las medidas de las puertas, pasillos y lugar de almacenaje en mi casa. Traté además de que una vez montada no se vieran demasiado las uniones.
Esta imagen corresponde al día previo al Games Day 2008, se pueden apreciar las partes de la maqueta durante el montaje. Este despiece permite transportar la maqueta a cualquier parte y almacenarla relativamente bien.
Con la maqueta una vez montada apenas se aprecian las uniones entre las diferentes piezas.
Tampoco hay que pasar por alto tu zona de trabajo. Si el elemento de escenografía no es muy grande podrás construirla en el mismo espacio donde pintas tus miniaturas aunque en este caso necesitarás también algo de sitio extra para los materiales y las herramientas.
Es importante también que el espacio de trabajo esté bien iluminado y ventilado, especialmente si vas a emplear algún producto que provoque olores muy fuertes como resinas o aerosoles.
Si por desgracia no tienes suficiente espacio en casa, pero te gustaría construir escenografía, una alternativa es acercarte a alguna asociación que cuente con un local y preguntar. No sólo estarán encantados de ayudarte, también podrás compartir experiencias y aprender de otras personas con las mismas inquietudes.
2. BUSCA REFERENCIAS
Los aficionados al juego de batallas estratégicas de El Señor de los Anillos y El Hobbit tenemos la enorme suerte de contar con una extensa cantidad de recursos gráficos que tomar como referencia o como fuente de inspiración. No sólo me estoy refiriendo a las películas de Peter Jackson o los, para mí, imprescindibles contenidos extra de las versiones extendidas, también existen multitud de libros e imágenes por internet de muchos artistas que han querido recrear el mundo de Tolkien a su manera.
Si se quiere representar un punto concreto de la Tierra Media creo que resulta de mucha utilidad recopilar toda la información posible sobre el mismo antes de ponerse a construir. Aunque no quieras que ese elemento sea exactamente igual que lo que sale en las películas siempre va a ser enriquecedor ver alternativas o los diferentes enfoques de otros artistas que a lo mejor no se te habrían ocurrido.
Considero que el trabajo de ambientación que hicieron en los escenarios de las películas es excepcional y además me encanta ver mis miniaturas en dichos escenarios, así que siempre intento aproximarme todo lo posible a las películas. Por este motivo, antes de empezar a construir trato de recopilar imágenes de lo quiero hacer desde diferentes ángulos y con el mayor nivel detalle posible.
Desde luego esto es una opinión totalmente personal. En la red hay infinidad de trabajos de escenografía inspirados en la obra de Tolkien que no tienen nada que ver con las películas que son realmente espectaculares.
La búsqueda de referencias no debe quedarse únicamente en el ámbito de la inspiración. Si vas a utilizar una nueva técnica por primera vez infórmate también buscando artículos o vídeos sobre la misma. También es buena idea hacer una pequeña prueba antes de aplicar esa técnica a todo el elemento. Si te lanzas y luego no queda bien te arrepentirás de no haberlo probado antes ya que a lo mejor no puedes dar marcha atrás.
3. DIBUJA UN BOCETO
Un boceto es un pequeño dibujo de lo que quieres construir. Lo ideal es que sea un esquema sencillo que te aclare los puntos más importantes y que puedas usar como guía cuando empieces la construcción, pero puede ser todo lo complejo y detallado que quieras.
Si es un proyecto de tamaño medio y ya has pensado en el espacio disponible, probablemente hayas dibujado un pequeño boceto de lo que pretendes construir. Si no es así, siempre recomiendo hacerlo antes de empezar para ver claramente cómo va a quedar y qué tamaño va a tener.
Otra utilidad de los bocetos es definir por donde se van a mover las miniaturas y cómo van a interactuar con la escenografía. También es en este momento cuando hay que decidir, en el caso de los elementos de escenografía más grandes, si va a tener partes desmontables y cómo hay que construirlas para que encajen bien.
Este es uno de los bocetos que dibujé en su día para construir la maqueta de Amon Hen. Quería incluir todo lo que se ve en la escena de la película así que marqué en el dibujo las posiciones de cada construcción tratando de que cupiera todo en una mesa de 160x120cm.
Foto de la maqueta de Amon Hen terminada. El resultado final se aproximó bastante a la idea del primer boceto. Todos los árboles se podían quitar y poner para favorecer la jugabilidad.
4. HAZ UN PRESUPUESTO
Incluso aunque utilicemos materiales reciclados hay que ser conscientes de que construir escenografía siempre va a tener un coste. Podremos reaprovechar el cartón de las cajas que haya por casa o el poliestireno de algún embalaje de electrodoméstico, pero siempre vamos a necesitar pinturas, vegetación, pegamento y otras herramientas específicas que no nos va a quedar más remedio que comprar. En la mayoría de los casos nos va a salir más barato hacer la escenografía nosotros mismos que comprarla ya terminada, pero es recomendable hacer al menos un cálculo rápido para no llevarnos luego una sorpresa.
En mi caso lo que hago es hacer un esquema muy básico de los pasos que debo seguir en la construcción anotando los materiales que necesito en cada uno de ellos. Con eso puedo hacer posteriormente una lista de materiales y herramientas que me van a hacer falta para luego poder comprobar que lo tengo todo antes de empezar. Si no lo tienes todo puedes calcular lo que te va costar adquirir lo que falta y ver cuánto te vas a gastar aproximadamente.
Lo ideal es tener todos los materiales reunidos antes de empezar a construir nada, de esta manera no tendrás que interrumpir la construcción durante varios días porque te falta algo. Personalmente no hay nada que me hunda más la moral que tener que dejar una construcción a medias porque me falta algún material que no va a llegar hasta dentro de 3-4 días.
Todos los materiales reunidos para construir una pequeña granja en ruinas. ¡Manos a la obra!
5. RESPETA LA AMBIENTACIÓN Y EL TRASFONDO
Las dos funciones más importantes que a mi juicio debe reunir cualquier escenografía son la jugabilidad, de la que hablaremos en el siguiente punto, y la ambientación o la capacidad de sumergirnos en la batalla que tenemos ante nosotros.
Probablemente todos estaremos de acuerdo en que no es lo mismo jugar una batalla en la mesa blanca de la cocina con algunos libros puestos como colinas y árboles hechos con papel de aluminio, que esa misma batalla en un tapete de hierba verde, con colinas y un par de bosques con su base bien acabados. Aunque en los dos casos podremos jugar sin problemas, sólo en el segundo caso nos sentiremos realmente dentro de una batalla en miniatura.
Es algo parecido a la diferencia entre jugar con todas las miniaturas pintadas o con una marea de plástico gris, el juego es el mismo pero la experiencia es totalmente distinta.
Esa capacidad de meternos de lleno en el trasfondo de la batalla está directamente relacionada con la ambientación, es decir que la escenografía sea acorde y mantenga una cierta lógica con los ejércitos que se van a enfrentar.
A nivel de juego un ejército de Gondor y otro de Harad se pueden enfrentar perfectamente en un terreno completamente nevado donde las únicas construcciones sean unas ruinas de Warhammer 40.000, pero es poco creíble. Y esa falta de credibilidad, por lo inverosímil de la ambientación, nos va a restar disfrute en la batalla.
Creo que es importante cuidar la ambientación y el trasfondo siempre que sea posible. Y con esto no estoy diciendo que haya que ponerse a hacer un montón de escenografía específica para cada ejército que tengamos. Existe cierta escenografía genérica como son los bosques, las colinas y ríos que valen para ambientar correctamente cualquier batalla de trasfondo fantástico-medieval. Esa escenografía genérica se puede combinar luego con algunas construcciones sencillas específicas de algún ejército en concreto, por ejemplo, una casa de Rohan si jugamos con rohirrim, y conseguir sin demasiado esfuerzo una mesa perfectamente ambientada en la Tierra Media.
6. PRIORIZA LA JUGABILIDAD
En el punto anterior hemos hablado de cómo los elementos de escenografía nos ayudan a sumergirnos en el trasfondo de la batalla que tenemos delante, pero por muy bonito y coherente que sea un campo de batalla, fracasaremos si no tenemos en cuenta la jugabilidad.
¿Pero qué es la jugabilidad? Pues se puede definir como la capacidad que tiene un elemento de escenografía de facilitar la libertad de movimiento de las miniaturas durante la partida.
En un juego de miniaturas la escenografía añade profundidad táctica por lo que las figuras deben poder interactuar con todos los elementos que haya sobre la mesa. No me refiero a que por ejemplo una casa de Rohan deba tener el tejado de quita y pon para jugar en su interior, eso sería sin duda ideal, pero desde luego no es imprescindible. Me refiero a problemas más simples como por ejemplo una colina con una pendiente demasiado pronunciada que no permita que las miniaturas se coloquen encima. Esto no sólo imposibilita el normal desarrollo de la partida, también puede dañar las miniaturas al estar constantemente cayéndose.
Ejemplos de errores de jugabilidad hay muchos y yo, como cualquier otro aficionado, he cometido varios: escaleras donde no se pueden posicionar las miniaturas, superficies demasiado inclinadas o resbaladizas (las miniaturas se caen), puertas demasiado pequeñas (las miniaturas no caben), etc. La mayoría se solucionan poner una miniatura encima de lo que estás construyendo para ver si se puede mover con facilidad.
La foto que veis arriba corresponde al proceso de construcción del segundo nivel de Minas Tirith que construí hace ya muchos años. En este caso, por un problema de falta de espacio, la rampa de acceso a la segunda muralla era demasiado pronunciada y las miniaturas se caían. Tuve que añadir algunos badenes para que las miniaturas se sostuvieran aunque sólo fuera un poco.
Aunque la jugabilidad no está totalmente reñida con el realismo sí puede limitarla. Habrá momentos en los que tendremos que sacrificar parte del realismo en favor de la jugabilidad ya que nunca debemos olvidar que estamos construyendo escenografía y las miniaturas deben poder maniobrar y situarse encima.
La jugabilidad es lo que diferencia un elemento de escenografía de un diorama. Un diorama es un elemento estático en el que podemos aproximarnos todo lo posible a la realidad, no hace falta que sea jugable porque ese no es su propósito. La escenografía por el contrario debe ser jugable y si para ello hay que sacrificar parte realismo habrá que hacerlo. La clave es tratar de llegar a un punto medio entre jugabilidad y realismo.
Un ejemplo claro de este conflicto entre la jugabilidad y el realismo es la hierba. Cuando construí la mesa de Hobbiton me hubiera encantado poner césped alto en muchas zonas del tablero y así aproximarme todo lo posible a la apariencia que tiene realmente en la película. El problema es que si lo hubiera hecho no se habría podido jugar en esas zonas (que representaban el 90% del tablero) ya que las miniaturas no se sostenían de pie. Tuve que sacrificar realismo para ganar jugabilidad.
Finalmente escogí una combinación de flock de Woodland Scenics ligeramente rugoso para representar las zonas verdes.
7. NO TE AGOBIES CON LA ESCALA
Para construir escenografía no hace falta ser arquitecto, ni complicarse demasiado la vida con la escala. Si me apuras ni siquiera hace falta saber lo que significa 1:64 ó 1:72. Se trata de hacer escenografía para un juego de miniaturas no el proyecto de fin de carrera de la carrera de arquitectura. Con seguir una serie de reglas lógicas y bastante intuitivas vas a poder hacer prácticamente cualquier cosa.
En esencia todos los problemas se pueden solucionar utilizando una miniatura de tamaño humano a pie como referencia mientras estás construyendo.
Los errores más comunes o donde más se puede ver que hay un problema de escala son los siguientes:
Tamaño de puertas y ventanas. Si vas a hacer una muralla, asegúrate de que las miniaturas pasan por la puerta. No sólo los guerreros a pie, también caballería, trolls, etc.
Tamaño de los bloques de piedra. Si son muy grandes no parecerá realista, si son muy pequeños tampoco y además se alargará mucho su construcción.
Tamaño de barandillas y escaleras. Las barandillas deben llegarle a la miniatura a la altura de la cintura, no se la pongas a la altura de la cabeza o las rodillas. En cuanto a las escaleras, los peldaños no deberían tener una altura superior a 0,5cm (la altura de la peana) si es mucho más no parecerán escalones sino una pendiente insuperable.
Tejas muy grandes. Al igual que los bloques de piedra debes recordar que las tejas no pueden ser muy grandes.
Troncos de árboles muy gordos o excesivamente altos/bajos. Hay árboles de todas las formas y tamaños y por tanto es difícil cometer demasiados errores de escala aquí. Lo único que hay que tener en cuenta es que el ancho del tronco y la altura del árbol sean proporcionales. Si el tronco es muy gordo y el árbol es bajito no será muy realista porque eso no ocurre en la naturaleza.
En el caso de las fortalezas puedes hacer los bloques de piedra más grandes de lo habitual sin que quede mal, de hecho así son también por ejemplo en la película. En construcciones más pequeñas como casas o vallas de piedra si te pasas con el tamaño no quedará bien.
Un ejemplo claro en el que se pueden tallar bloques de piedra algo más grandes, y además queda bien, es en fortalezas como El Abismo de Helm.
8. CONOCE LOS MATERIALES
Existen infinidad de materiales que pueden utilizarse para construir escenografía. Para alguien que va a empezar a construir escenografía basta con saber que hay materiales que son más útiles que otros y los problemas principales que presentan. Yo divido los materiales en 3 categorías:
Principales: Poliestireno extruido, madera (de balsa y DM) y cartón (pluma o fino)
Secundarios: Arena/gravilla, masillas, plasticard, alambre y resinas.
Vegetales: césped, matojos, follaje, ramitas/raíces.
Los materiales principales son los que suelo usar casi siempre, independientemente de lo que vaya a construir. Los secundarios serían aquellos que utilizo bastante pero no tanto como los principales, normalmente para añadir algún detalle específico. Y finalmente los vegetales, como su nombre indica, son aquellos que hay que utilizar para añadir vegetación en cualquiera de sus formas.
Por sus peculiares características, el poliestireno extruido es sin ninguna duda el material estrella para construir escenografía.
Hay muchas maneras de combinar estos materiales y al pegarlos unos a otros es cuando debes tener en cuenta dos grandes problemas que te pueden ocurrir:
-
Los adhesivos instantáneos tipo Loctite/Superglue de cianoacrilato derriten literalmente el poliestireno. En función de la calidad del poliestireno se derretirá más o menos, pero se deteriora igualmente. Tampoco resultan útiles para la madera de balsa ya que ésta absorbe el adhesivo hacia su interior reduciendo la cantidad de pegamento que queda en la superficie y limitando mucho la adherencia. Para el poliestireno y la madera de balsa hay que usar adhesivos vinílicos, lo que en España se conoce como cola o cola blanca.
-
La cola blanca, a pesar de ser uno de los adhesivos más usados y útiles para construir escenografía, también presenta algunos problemas ya que al secarse se contrae. Por eso cuando se pega una base de madera a una plancha de poliestireno la madera acaba combándose. La solución en estos casos es construir un bastidor de madera debajo.
A la hora de pintar también debes tener en cuenta la incompatibilidad de ciertos materiales. El caso más famoso es el del spray de imprimación y el poliestireno que he comentado en la introducción. Pasa lo mismo que con el pegamento rápido, si lo aplicas directamente sobre el poliestireno éste se acabará derritiendo.
Hay modelistas que aplican una capa fina de cola blanca al poliestireno para poder imprimarlo a spray, esto en teoría crea una capa protectora que protege el poliestireno del spray pero tiene dos inconvenientes. El primero es que resta detalle al acabado final y segundo, si te has dejado alguna parte sin aplicar cola se acabará derritiendo lo que hay debajo. Si no quieres utilizar la brocha puedes utilizar el aerógrafo si dispones de él.
Por supuesto si tienes hijos, hermanos pequeños o mascotas en casa no dejes aquellos materiales peligrosos a su alcance, especialmente los tóxicos (resinas, masillas) y cortantes (alambre, cutter, etc)
9. ELIGE EL FORMATO MÁS ADECUADO
La escenografía en un juego de miniaturas se puede construir básicamente en 3 formatos:
-
Elementos independientes sobre un tapete
-
Tableros modulares
-
Maqueta completa personalizada
Elementos independientes: Es la opción más extendida y popular. Consta de elementos tales como bosques, colinas y construcciones que se pueden combinar sobre un tapete de hierba o de plástico impreso para formar un campo de batalla.
Tableros modulares: Tableros de pequeño tamaño (en torno a 60x60cm) que representan diferentes tipos de terreno tales como ríos, campos o montañosos que se pueden combinar entre sí dando lugar a diferentes tipos de campos de batalla.
Maqueta completa personalizada: Mesa que representa un lugar muy concreto con gran nivel de detalle y normalmente con pocas partes móviles. Ej. Una maqueta de la ciudad de Minas Tirith.
Cada uno de ellos tiene sus ventajas e inconvenientes:
FORMATO | VENTAJAS | INCONVENIENTES |
Elementos independientes con un tapete | + Ocupa poco espacio + Mucha versatilidad + Es la opción más económica |
- Menor nivel de realismo que otras opciones |
Tableros modulares | + Mayor nivel de realismo que la primera opción + Versátil + Combina con elementos independientes |
- Ocupa más espacio - Requiere más tiempo de construcción |
Maqueta personalizada | + Mayor nivel de realismo + Inmersión total en la partida |
- Ocupa mucho más espacio
|
La elección de un formato u otro depende de muchos factores, desde el tipo de elemento de escenografía que queramos representar, el presupuesto que tengamos o el espacio de almacenamiento en casa.
En general, si no disponemos de mucho espacio o acabamos de empezar en este mundo lo recomendable es empezar por la primera opción: elementos de escenografía sueltos sobre un tapete. Empezar con dos o tres bosques, un par de colinas y algunas ruinas es barato, no requiere una gran cantidad de tiempo, cabe fácilmente en una caja de cartón y basta para montar una partida rápidamente.
Los elementos sueltos no tienen por qué limitarse a unos cuantos bosques y colinas. Con un poco de tiempo y maña se puede construir prácticamente cualquier cosa. Lo más importante a tener en cuenta es la manera en que todos los elementos van a combinar en el campo de batalla.
La siguiente foto muestra una mesa de la Ciudad de los Trasgos completamente construida con elementos independientes que combinan entre sí. El punto más importante que tuve que vigilar fue la altura a la que quedaban las diferentes pasarelas para que no quedaran desniveles entre ellas una vez juntas.
El siguiente tablero de Rohan es un ejemplo de una maqueta completamente integrada, sin partes móviles. Pude hacerlo así porque el tamaño era relativamente pequeño (90x60cm) y no tenía demasiada altura. Su forma y tamaño permiten trasladarlo y almacenarlo sin demasiados problemas, también sirve como mesa de exposición.
10. NO TENGAS PRISA POR TERMINAR
Una vez se empieza la construcción creo que lo más importante es resistirse a la tentación de tratar de terminar lo antes posible. En mi opinión es mucho más recomendable pensar bien cada paso, repasar bocetos y medidas, hacer pruebas y estar seguros de lo que vamos haciendo. El resultado será considerablemente mejor y disfrutarás mucho más el proceso, al fin y al cabo, lo más probable es que sólo construyas ese elemento de escenografía una vez. Así que disfrútalo.
Durante los años que estuve construyendo maquetas para llevar con La Guerra del Anillo a los Games Day siempre tuve que trabajar con la presión de acabar antes de una fecha límite. En los últimos días antes del evento el nivel de estrés era máximo y muchas veces me dejé sin añadir algún detalle extra sencillamente porque no tenía tiempo suficiente. Hoy me arrepiento no sólo de no haber añadido esos detalles (por ejemplo, las estatuas de los vigilantes de Cirith Ungol que empecé pero nunca llegué a terminar) sino de no haber podido disfrutar más del proceso. Al final esto no deja de ser una parte del hobby y si no podemos disfrutarlo plenamente no merece la pena.
Todos los detalles son importantes, no te los saltes por querer acabar antes.
CONCLUSIÓN
En este artículo he intentado resumir lo que a mi parecer son 10 puntos importantes a la hora de construir cualquier elemento de escenografía. Por supuesto todo esto no deja de ser una opinión personal, como tal subjetiva y perfectamente abierta a debate. Aun así, espero que resulte útil y os evite algunos problemas a la hora de construir vuestra propia escenografía.
Me gusta todo, pero especialmente la reflexión que haces sobre la jugabilidad, el almacenamiento y el formato (por ese orden).
¿Qué piensas de la versatilidad? Aunque respetemos la ambientación y el trasfondo, creo que hay elementos que pueden ser intercambiables en diferentes escenarios, así que puede resultar muy interesantes sumarlos desde un principio a la colección.
¡Muchas gracias por compartir!
Muchas gracias a los dos